17/2/09

Debilitar la democracia

Si a quienes conocemos la trayectoria y los modos de Benjamín Martín Vasco no nos pareció una buena noticia su nombramiento como Presidente de la Comisión de investigación de la Asamblea de Madrid sobre la red de espionaje vinculada al Gobierno de Esperanza Aguirre, su presunta implicación en la red de corruptelas del Caso Gürtel no hace sino desvirtuar y ensombrecer el ejercicio de transparencia que se espera de las instituciones democráticas.

Quienes se valen de su proximidad al poder para su propio beneficio, para engordar sus cuentas corrientes, no sólo manchan el nombre de la política, sino que además, menosprecian y desprestigian el buen nombre de las instituciones públicas.

La política siempre ha estado y debe estar al servicio de los ciudadanos, del mismo modo que las instituciones públicas deben servir de soporte y apoyo a las personas, en particular, en circunstancias como las actuales. El daño que el Gobierno de Esperanza Aguirre está haciendo a las instituciones madrileñas posiblemente no tenga reparación. Su credibilidad y su imagen están siendo pisoteadas por las ambiciones personales de unos y otros, por la desconfianza y la desunión en el seno de su Gobierno.

El uso partidista y personalista del buen nombre de la Comunidad de Madrid no puede continuar. La democracia exige transparencia, honestidad y honradez. Exige responsabilidad y sentido del deber, y el Gobierno de Esperanza Aguirre está menospreciando todos estos principios en que se sustenta nuestro sistema democrático.

7/2/09

Comisiones y comisionistas

Seguramente los argandeños sepamos mejor que nadie que no es una buena noticia que la Comisión de Investigación sobre el caso de los espías del Gobierno de Esperanza Aguirre esté presidida por un señor que tuvo que salir del municipio donde comenzó su carrera política por diferentes enfrentamientos y escándalos.

Con el señor Martín Vasco al frente de la Comisión de Investigación la transparencia y el esclarecimiento de los hechos constituye un nuevo obstáculo que el Gobierno de Esperanza Aguirre pone a la verdad y a los principios básicos de la democracia.

En paralelo, la corrupción vuelve a apuntar a unos municipios donde el PP lleva gobernando desde los primeros momentos de la democracia española: Majadahonda, Boadilla... Municipios que acumulan escándalos nunca esclarecidos, pero que son fundamentales para la financiación de la red clientelar que el PP que dirige Esperanza Aguirre ha ido tejiendo durante años para permanecer en el poder.

Cada vez hay menos dudas sobre los síntomas de debilitamiento del sistema democrático y de las instituciones en la Comunidad de Madrid.