19/9/12

Yo no me alegro

No me alegro de que haya dimitido Esperanza Aguirre como Presidenta de la Comunidad de Madrid.  En primer lugar, por respeto a la democracia y a la voluntad ciudadana expresada en las urnas: Fue a ella y no a ningún otro a quien eligieron los madrileños y madrileñas, y puesto que, afortunadamente, no parece que haya sufrido una recaída en su enfermedad anterior a la cita de las elecciones de 2011, debería cumplir el compromiso que adquirió por cuatro años.

Con todo,  lo que me resulta más indignante es que lo haga cuando ha impuesto un cambio de modelo social en la Comunidad de Madrid que ahora muchos madrileños empiezan a ver claro, y contra el que manifiestan abiertamente su disconformidad. Ha ejercido como Presidenta para arrasar con las Escuelas Infantiles de la Comunidad de Madrid, para eliminar las becas de comedor y libros, para imponer la discriminación, para limitar el acceso a la universidad a los hijos de los trabajadores, para desmantelar el sistema de ambulancias,… en resumen, para convertir los servicios públicos madrileños en “oportunidades de negocio” para un grupo bastante reducido de empresarios y especuladores; ahora lo valiente, y lo decente, sería aguantar ahora el tirón, ser valiente, dar la cara y no abandonar el barco en manos de un subalterno.

En su discurso de despedida en el Debate sobre el Estado de la Región lo dejo muy claro; según ella, “la sanidad, la educación, el cuidado familiar es, en primer lugar, responsabilidad esencial de sus familias. Hay que hacer cambios fundamentales en el modelo social. Para salir de la crisis es necesario que los ciudadanos recuperen la responsabilidad sobre asuntos que habían dejado en las manos del Estado”  Ese es el argumento para el desmantelamiento del estado de bienestar que está llevando a cabo el Partido Popular; no es una cuestión de dinero, no es la economía, es el modelo de estado, el desmantelamiento de la sociedad civil: la familia como núcleo autónomo, culpable de sus fracasos, necesidades y enfermedades, responsable en solitario de su destino y al albur de la economía de mercado. 

Es un concepto coherente con sus acciones, desde luego. El ideario que les permite afirmar barbaridades como esas de que ”si hay copago farmacéutico para los pensionistas es por su culpa porque abusan de los medicamentos; si se suben las tasas universitarias es por culpa de los estudiantes que son unos vagos; si se recortan las prestaciones por desempleo es por culpa de los parados que no se molestan en buscar trabajo; …” Esos insultos colectivos que se deberían clavar como dardos en la inteligencia y el corazón de cada uno de nosotros.  Cambiar sociedad civil por núcleo familiar, política por economía, democracia por designación, solidaridad por caridad, derechos por “sálvese quien pueda”, no significa la vuelta al franquismo, significa el retorno a un sistema de clases blindado para los de arriba y sin libertad ni oportunidades para el resto.


Victoria Moreno
Secretaria General del PSOE de Arganda y portavoz del Grupo Municipal Socialista

1 comentario:

Javier Collado dijo...

Jojojo. Dice "Fue a ella y no a ningún otro a quien eligieron los madrileños". ¡Estos tampoco se han enterado de que se votan listas de diputados, no al presidente!
"debería cumplir el compromiso que adquirió por cuatro años". Menos mal que el PSOE madrileño no lleva unos cuantos años pidiéndole la dimisión... ¡Ah, no, que sí que lo hizo!
Eso son hechos. Lo demás, ideología, y ahí que cada cual "piense" lo que quiera. Pero que la representante de un partido a nivel municipal muestre tamaño desconocimiento del sistema democrático español y de las acciones pasadas de su partido resulta vergonzoso.